A todos nos encantaría trabajar en un espacio acogedor y funcional. Sin embargo en cualquier momento trabajar puede convertirse en una verdadera pesadilla.
Ya sea al comienzo o al final de la semana. O bien antes de una reunión importante. O también cuando se recibe una carga de trabajo particularmente intensa.
Esto se debe, entre otras cosas, a no poder moverse cómodamente en tu propia oficina.
Afortunadamente es posible renovar tu ambiente de trabajo con un presupuesto limitado. Ya que incluso con modificaciones mínimas es posible mejorar el ambiente en la oficina para que sea acogedor y funcional.
¿Cómo embellecer la oficina con un presupuesto limitado?
Estos son algunos consejos sobre cómo dar una nueva imagen a cualquier lugar de trabajo de una manera sencilla y económica:
Muebles
El primer paso para transformar la oficina y darle un nuevo aspecto es cambiar los muebles.
Incluso el simple hecho de mover los muebles podría convertirse en una verdadera panacea y reactivar el medio ambiente.
Luego hay varias líneas de mobiliario de oficina , clásico, moderno y contemporáneo, adecuado para todas las ocasiones y para todos los gustos.
Pero como hablamos de un presupuesto limitado no nos centremos en el gusto, más bien seamos pragmáticos.
Pongamos un ejemplo. Digamos que eres abogado. Tu trabajo consiste en revisar libros todo el día. Es un rollo pararse y sentarse cada vez que buscas un libro. Para esto podrías usar un carro doble frontal. De esta forma puedes acercar los libros a ti.
No es un mal gasto convertir tu oficina en un lugar acogedor y funcional. No hay nada más productivo que un empleado cómodo y feliz. Recuerda que el cambio podría ser tu mejor inversión.
Cambio de vestuario
El cambio de vestuario en la oficina es algo que podría ahorrarte mucho tiempo. Si eres de aquellas personas verdes que les gusta ir al trabajo en bici, cambiarte al llegar en indispensable. No vas a montar bici encorbatado.
Siempre existe la opción de cambiarse en el baño de la oficina. Pero a veces no es el lugar más higiénico donde nos gustaría estar. Otras veces sucede que no te otorgan la privacidad que deseas.
En pro de hacer tu oficina un lugar más acogedor y funcional te sugerimos adquirir un taquilla. No es muy grande, no es muy costosa. Pero más importante, es muy cómoda.
Y si crees que no combinaría con la oficina, piensa cómo se vería tu ropa sobre una silla.
Sistemas de archivo
Después de hacer tu despacho más acogedor y funcional, todo lo que queda es reorganizarlo para siempre.
Coloca los documentos utilizados cronológicamente o alfabéticamente en carpetas, sobres y cajas dentro de archivadores y estantes. De este modo se evita tener hojas y documentos importantes dispersos por todas partes.
Al hacer estos no sólo serás más productivo y eficiente. También reducirás considerablemente tu nivel de estrés y harás de tu despacho un lugar más
acogedor y funcional.
Ordena lo que necesites y destruye lo que no necesites
Otra forma de ordenar es dividir sus artículos de escritorio en una bandeja de sobremesa.
No hay nada más frustrante que estar frente a un cliente al firmar un contrato importante y no poder encontrar una pluma para hacerlo. Para esto siempre debes tener sobre el escritorio un cubilete.
Recuerda entonces, que la mejor manera de mantener el orden es deshacerse de lo superfluo. Para esto, utiliza una destructora de papel que elimine todas las hojas sueltas que ocupan espacio innecesario en su escritorio.
Utiliza un purificador de aire
Un purificador de aire o filtro de aire es un dispositivo que elimina los contaminantes del aire en una habitación.
Estos dispositivos se comercializan comúnmente como beneficiosos para las personas alérgicas y los asmáticas.
También son muy útiles para reducir o eliminar el humo del tabaco de segunda mano.
Si eres un no fumador y trabajas rodeado de fumadores, este aparato será la mejor inversión de tu vida.
Podemos concluir comentando que renovar tu oficina es un cambio sencillo y económico que trae muchos beneficios.
Mientras más acogedor y funcional sea tu despacho más eficiente serás en el trabajo.
Hasta hace unos años, las oficinas tenían que emanar una cierta autoridad.
Debían estar completamente amuebladas con muebles clásicos importantes, escritorios impresionantes, sillones tapizados y estanterías grandes.
Hoy ya no es así. La oficina de hoy en día se ve mucho más fácil y abierta.
Es un entorno relajante y conciliatorio, que lleva al trabajador a producir más sin ser aplastado por la gran oficina.
Por lo tanto, no consideres renovar su oficina como un gesto y un gasto innecesarios. Hacer que el ambiente sea más acogedor y funcional garantizará mejoras significativas a su salud física y mental.